CD El Álamo 3 - SAD Villaverde San Andrés 1 (Flores 3)
El Álamo consiguió la segunda victoria consecutiva del año ante un Villaverde que sigue ocupando el puesto de colista con una plantilla totalmente renovada respecto al inicio de campaña. Los del Facundo Rivas dan un paso importante en su objetivo de la permanencia con un colchón de 7 puntos.
A los tres minutos del inicio llegó el primer tanto para los locales.
En un rápido contragolpe, Elmer se internó por la izquierda, cedió el esférico a Flores que con sutileza puso el balón al segundo palo lejos del alcance de Figueroa. Empezaban bien los verdes, que tenían muy claro como jugar a su rival, buscando la velocidad de sus puntas.
El Boetticher reaccionó y no se vino abajo, todo lo contrario.
Se hicieron con el control del esférico y tuvieron su recompensa desde los 11 metros tras jugada individual de Adrián que fue trabado dentro del área por Tomás. El propio Adrián puso las tablas en el marcador. Fueron los mejores minutos del Villaverde ante un desconcertado conjunto alameño.
Pero de nuevo Elmer desequilibró el encuentro. El extremo, esta vez por la derecha, puso un gran centro al segundo palo para que Flores hiciera el segundo. El conjunto de Sergio Fernández se quedó con un futbolista menos al ver Etienne la roja directa por agarrón a Gonzalo cuando enfilaba sólo la portería. Antes del descanso, un penalti sobre el propio Gonzalo lo transformó Flores que culminó así su particular hat trick.
Tras el asueto, el encuentro se convirtió en un ida y vuelta constante.
Los dos conjuntos se fueron al ataque en un partido roto. Fer, nada más comenzar, tuvo dos claras ocasiones que no acertó a encontrar portería. Iker Muñoz, para los visitantes, disparó desde la frontal obligando a Sebas Rosales a detener el balón en dos tiempos. Gonzalo tuvo el cuarto a pase de Helmer pero Figueroa lo evitó con una gran intervención.
Las fuerzas se igualaron tras la expulsión de Tomás por dar un cabezazo a un rival. Las llegadas a las áreas seguían sucediéndose. La entrada de Pablo Rivero en las filas visitantes revitalizó su juego de ataque y el propio Rivero, de falta directa, estuvo cerca de recortar distancias, al igual que su compañero Alejandro que disparó dentro del área por encima del travesaño.
El resultado pudo reflejar un mayor número de goles pero incomprensible en la segunda parte no se volvió a mover el marcador.
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